Soy monica marcela, como muchas personas me nombran, porque cuando me preguntan cómo elijo que me nombren, les digo que con los dos me siento muy cómoda y me reconozco, solo que cuando me dicen Moni, me hace más sentido a lo familiar y a mis raíces y “la Marce” me suena más a la profesional a la licenciada como dice la Universidad Nacional de Córdoba, donde realice mis estudios de grado. Soy Argentina, nacida en la provincia de Jujuy con raíces muy andinas y ancestras Bolivianas, mujeres curtidas por el viento, el sol y mucho más por la idiosincrasia cultural que habite y a veces habita mis territorios actuales en tierras cordobesas que me adopto cuando migre a los 18 años.
Tengo el privilegio de maternar a dos hijes los cuales ya hoy dos jóvenes que vibramos a la par.
De formación académica, psicóloga clínica y comunitaria, Terapeuta Narrativa hasta la medula, ya que atravesó mi vida personal y familiar a pleno. Mis primeros pasos como terapeuta fue la incertidumbre total, hasta que leí la biblia de la narrativa y morí de amor y se me abrieron las puertas de las narrativas y me pegue a Encuentros Narrativos y gran parte de mi formación la hice con ellas.
Me especialice en el acompañamiento a personas que experimentaron situaciones de violencias, abusos y violencias extremas desde la perspectiva de género y enfocado en derechos humanos. Como también el acompañamientos a personas no binarias y es otro privilegios acompañar esta “migración de identidades” tan bien expresado por el congreso.
He creado dispositivos terapéuticos grupales para mujeres que vivieron situaciones de violencias desde la postura y recursos de las prácticas narrativas.
“Caminante, no hay camino, se hace camino al andar. “Ese ha sido mi trabajo, caminando en las comunidades, en los territorios allá donde se pierde la luz, hasta allá fui, llevando narraciones que busquen las historias extraordinarias de las personas.
Y ese andar y el ímpetu por la utopía me llevo a constituir una fundación, que es mi tercer maternaje.
“Fundación Hilando Relatos” que tiene como misión crear espacios de acompañamiento para promover y facilitar relaciones interpersonales libres de violencia, desde un posicionamiento que tenga centralidad en la perspectiva de género y la ampliación de la plataforma de derechos humanos, a través procesos reflexivos y críticos como también la formación y acompañamiento de personas, grupos y comunidades. En eso andamos.